El Mundo de los Ladrones

A finales de la década de los años 70 el género fantástico, lastrado por la herencia de la obra de Tolkien, comienza a ver los primeros destellos de una futura renovación. En 1978, dentro de esa ola regeneradora, el ya desaparecido escritor norteamericano Robert Lynn Asprin reúne a un nutrido número de escritores de género fantástico para desarrollar un nuevo mundo fantástico. Amén de en la forma innovadora de desarrollar dicho nuevo universo, de forma cooperativa entre muy diversos escritores, las historias que se escribirán tendrá ya elementos comunes a la literatura fantástica actual. No obstante no creo que pueda incluirse al Mundo de los Ladrones en el grupo de la literatura fantástica actual, por lo que lo seguiré catalogando como un clásico dentro del género. El Mundo de los Ladrones, nombre genérico de esta larga serie de más de veinte novelas, antologías de cuentos, comics e incluso un juego de rol, es un mundo oscuro, violento, más cercano en espíritu a la literatura pulp de espada y brujería que a la alta fantasía. Sus historias se desarrollan principalmente en la ciudad de Santuario, urbe casi olvidada del Imperio, habitada por toda una suerte de personajes extravagantes y peligrosos, cuyo concepto de moral y ética deja mucho que desear.

En España tan solo vieron la luz las dos primeras novelas de la serie oficial. Un lástima que los hispanohablantes no hayamos podido disfrutar de la serie completa puesto que, si bien no son obras maestras ni mucho menos, la inmensa mayoría de sus relatos, obra de autores con cierto peso en su época (Marion Zimmer Bradley, Poul Anderson, John Brunner…), son francamente entretenidos, rayando a gran nivel en algunos momentos. Espero de corazón que alguno de los sellos editoriales que a día de hoy están dándole vida al género en España (La Factoría, Alamut…) se decidan a recuperar estas novelas. Ilustran estas líneas de Hic Svnt Dracones el mapa de la ciudad de Santuario y del Mundo Conocido. Que ustedes lo disfruten.